El tonto leído escribe sus tonterías en un mejor lenguaje que el resto, pero todavía son tonterías.
Benjamin Franklin. Almanaque del pobre Richard
Frases y fragmentos de libros que te harán pensar
El tonto leído escribe sus tonterías en un mejor lenguaje que el resto, pero todavía son tonterías.
Benjamin Franklin. Almanaque del pobre Richard
Vidrio, porcelana y reputación se rompen fácilmente y nunca se reparan por completo.
Benjamin Franklin. Almanaque del pobre Richard
Como disfrutamos de grandes ventajas gracias a las invenciones de otros, deberíamos alegrarnos de tener la oportunidad de servir a otros con cualquier invención nuestra; y esto deberíamos hacerlo libre y generosamente.
Benjamin Franklin. Autobiografía
El hombre solo inventa lo que necesita en cada momento, incluso olvida descubrimientos pasados cuando ya no les son útiles, lo que tampoco indica que para cada necesidad solo exista una única solución, esta viene dada por las circunstancias del momento, el azar y otros intereses que pueden ser económicos o sociales. Tampoco se puede confundir felicidad con nivel de vida
José Ruiz Mata. La Atlántida
Según Jung: Cuando analizamos a la persona retiramos la máscara y descubrimos que lo que parecía individual es, en el fondo, colectivo; en otras palabras, que la persona era solo una máscara de la psique colectiva. Fundamentalmente, la persona no es nada real: es un convenio entre el individuo y la sociedad sobre aquello que el hombre debe parecer ser. Adopta un nombre, obtiene un título, ejerce una función, es esto o aquello. En cierto sentido todo ello es real, y sin embargo, en relación con la individualidad esencial de la persona en cuestión se trata solamente de una realidad secundaria, de un convenio en donde los demás tienen generalmente más influencia. La persona es una semblanza, una realidad bidimensional, por otorgarle un apodo.
Jordan Peterson. Mapas de sentidos: La arquitectura de la creencia
Los ganadores, obviamente, tienen más probabilidades de justificar la jerarquía y los perdedores, de criticarla. Pero la búsqueda colectiva de cualquier objetivo valorado produce una jerarquía (puesto que a algunos les irá mejor y a otros peor, sea lo que sea lo que se busque) y es la búsqueda de objetivos lo que en gran parte otorga a la vida su significado fundamental. Experimentamos casi todas las emociones que hacen que la vida resulte profunda e interesante como consecuencia de nuestro satisfactorio progreso hacia algo que deseamos profundamente y que valoramos. El precio que pagamos por nuestra implicación es la inevitable creación de jerarquías de éxitos, mientras que la consecuencia inevitable es la diferencia de resultados. La igualdad absoluta requeriría, pues, el sacrificio del propio valor y entonces no habría nada por lo que mereciera la pena vivir. Por el contrario, podemos señalar con gratitud que una cultura compleja y sofisticada permite muchos juegos y muchos jugadores que ganan, y que una cultura bien estructurada permite a aquellos individuos que la componen jugar y ganar de formas muy diferentes.
Jordan Peterson. 12 reglas para vivir: un antídoto al caos
Cuando alguien asegura que actúa en nombre de los principios más elevados, por el bien de los demás, no hay ningún motivo para suponer que dichas motivaciones sean genuinas. A las personas motivadas para mejorar las cosas normalmente no les interesa cambiar a los demás y, si es el caso, asumen la responsabilidad de aplicarse a ellos mismos y en primer lugar esos mismos cambios.
Jordan Peterson. 12 reglas para vivir: un antídoto al caos
Ser un “ciudadano” implica estar comprometido, contribuir, dar y recibir, mientras que ser un “consumidor” sugiere únicamente comprar, como si nuestra única función fuera devorar todo lo que esté a la vista, a la manera de las langostas que se abalanzan sobre un campo de granos.
Marcia Bjornerud. Conciencia del tiempo.
Quienes piensan a corto plazo son recompensados con bonos y con la reelección, mientras que aquellos que se atreven a tomar en serio nuestra responsabilidad respecto de las generaciones futuras suelen encontrarse por lo general superados en número, acallados y fuera del cargo.
Marcia Bjornerud. Conciencia del tiempo.
Sin ilusión monumental, a los ojos de los vivos la historia no sería sino una abstracción. La especie social está poblada de monumentos no directamente funcionales, imponentes construcciones de piedra o modestos altares de barro, ante los que cada individuo puede tener la sensación justificada de que en su mayor parte lo han preexistido y le sobrevivirán.
Marc Augé. Los no lugares