
Aunque en la psique humana encontramos la raíz del amor por el pronóstico, fue en el cientifismo visual y en el afán productivista de la imagen en donde ese impulso derivó hacia una ideología de lo objetivo, obsesionada por saberlo todo y por cancelar toda forma de incertidumbre. En el fondo, ese proceso ha acabado siendo una carrera para suspender el futuro, para prescribirlo bajo el dictado de vaticinios y terapias.
Jorge Luis Marzo. Las videntes