De igual modo que hay una honradez de la voluntad, hay una honradez del entendimiento: estudiar a fondo las cosas y saber cambiar desinteresadamente de opinión.
Santiago Ramón y Cajal. Charlas de café
Frases y fragmentos de libros que te harán pensar
De igual modo que hay una honradez de la voluntad, hay una honradez del entendimiento: estudiar a fondo las cosas y saber cambiar desinteresadamente de opinión.
Santiago Ramón y Cajal. Charlas de café
Nada odia más el fanático que al audaz contradictor de su verdad; porque, por más que alardee de imparcial, allá en el fondo de su conciencia no está muy seguro de aquella y mira con horror a cuantos le disputan el tesoro de su fe, a la que debe, aparte la tranquilidad del ánimo, el inestimable don del ahorro del pensamiento. De mí se puede decir que, por haber olvidado este consejo -harto vulgar por otra parte-, he perdido docenas de amigos. Aunque bien miradas las cosas, ¿merecen el nombre de tales quienes, en su intransigencia dogmática, pretenden arrebatarnos el excelso privilegio de discurrir por cuenta propia?
Santiago Ramón y Cajal. Charlas de café
Así como el hombre no está hecho para ser juguete de una naturaleza ciega, tampoco está hecho para ser juguete de las colectividades ciegas que forma con sus semejantes. Pero, para dejar de estar librado a la sociedad tan pasivamente como una gota de agua en el mar, sería necesario que pudiera conocerla y actuar sobre ella.
En todos los terrenos, es verdad, las fuerzas colectivas rebasan infinitamente las fuerzas individuales, y así, es tan difícil concebir un individuo que disponga siquiera de una porción de la vida colectiva como imaginar que una línea se prolonga por la adición de un punto. Al menos en apariencia, pero en realidad hay una excepción, y una sola: el dominio del pensamiento.
Simone Weil. Reflexiones sobre las causas de la libertad y de la opresión social
Se puede entender por libertad otra cosa que la posibilidad de obtener sin esfuerzo lo que place. Existe una concepción muy diferente de la libertad, una concepción heroica que es la de la sabiduría común. La verdadera libertad no se define por una relación entre el deseo y la satisfacción sino por una relación entre el pensamiento y la acción.
Sería totalmente libre el hombre cuyas acciones procedieran todas de un juicio previo sobre el fin propuesto y el encadenamiento de los medios propios para llevar a este fin. Poco importa que las acciones en sí mismas sean fáciles o dolorosas, y poco importa además que sean coronadas por el éxito. El dolor y el fracaso pueden hacer desgraciado al hombre pero no pueden humillarlo mientras sea el mismo quien dispone de su propia facultad de actuar.
Simone Weil. Reflexiones sobre las causas de la libertad y de la opresión social
Los que han tenido el raro privilegio de amar de verdad sabrán siempre distinguir la diferencia de intensidad y de respeto que existe entre pensar como «nosotros dos» y pensar como «nosotros»; pero ya no lo saben decir. A decir verdad, para ello se necesitaría el dual del griego antiguo.
Andrea Marcolongo. La lengua de los Dioses: Nueve razones para amar el griego
Todos esos particulares mercenarios que el pueblo llama sofistas, y que juzga que las lecciones que dan son opuestas a lo que el mismo pueblo cree, no hacen otra cosa que repetir a la juventud las máximas que el pueblo profesa en sus asambleas, y a esto llaman sabiduría.
Figúrate un hombre que hubiese observado los movimientos instintivos y los apetitos de un animal grande y robusto, el punto por el que se podrá aproximar a él y tocarle, cuándo y por qué se enfurece o se aplaca, qué voz produce en cada ocasión, y por qué y qué tono de la de otros le apacigua o le irrita, y que, después de haber aprendido todo esto con el tiempo y la experiencia, formase una ciencia que, como un sistema, se pusiese a enseñar, sin servirse, por otra parte, de ninguna regla para discernir lo que en estos hábitos y apetitos es hermoso o feo, bueno o malo, justo o injusto; conformándose en sus juicios con el instinto del animal, llamando bien a todo lo que le halaga y causa placer, mal a todo lo que le irrita; justo y bello a lo que es inevitable; sin hacer otra distinción, porque no sabe la diferencia esencial que hay entre lo que es bueno y lo que es inevitable; diferencia que no conoció jamás, ni está en estado de hacerla conocer a los demás. ¿No te parecería, por Zeus, bien ridículo un maestro semejante?
Platón. La República
Un número creciente de individuos se siente desconcertado y confundido acerca de todo, ya sea el trabajo, la política o la moral y, lo que es peor, cree que esta confusión constituye un estado normal de la mente. Se sienten aislados, aturdidos e impotentes; no experimentan la vida en función de sus propios pensamientos, emociones y percepciones sensorias, sino en función de las vivencias que se supone deben tener. En estas personas autómatas, no obstante que la duda activa ha desaparecido, su lugar ha sido ocupado por la indiferencia y el relativismo.
Erich Fromm. Ética y psicoanálisis
Veo muy claramente en la igualdad dos tendencias: una que lleva el espíritu de cada hombre hacia pensamientos nuevos, y la otra que lo reduce fácilmente a no pensar más. Y veo que, bajo el imperio de ciertas leyes, la democracia ahogará la libertad intelectual que el estado social democrático favorece, de tal manera que, después de haber destruido todos los obstáculos que antiguamente le imponían las clases o los hombres, el espíritu humano se encadenará estrechamente a las voluntades generales de la mayoría.
Alexis de Tocqueville. La democracia en América
Con el conocimiento sucede una cosa muy interesante y es que (tal y como sucede con el deseo, pues el deseo de saber es también un deseo) nunca se colma del todo. Nuestras creencias se mantienen porque nos dan seguridad pero, las certezas han de ser sustituidas por una forma de pensar basada en probabilidades. Un escepticismo o pensamiento critico que no brinda una seguridad inmediata pero que a la larga es fortalecedor de nuestros rasgos mas adaptativos pues cada hallazgo crea una bifurcación en nuestra concepción del mundo y en esos mundos que van apareciendo van disolviéndose las antiguas creencias del tal modo que no es necesario confrontarse con ellas, simplemente se disuelven.
Francisco Traver. Consejos al joven terapeuta