En la época de mi abuelo, si te sentías mal contigo mismo pensabas: «Caray, hoy me siento como excremento de vaca…Pero, bueno, supongo que así es la vida. A seguir paleando la paja». ¿Y ahora? Si te sientes mal contigo mismo unos cinco minutos, eres bombardeado con 350 imágenes de personas totalmente felices, que viven unas vidas increíblemente fantásticas y es imposible no creer que tienes algún problema.
Esta última parte es la que nos mete en líos. Nos sentimos mal por sentirnos mal. Nos sentimos culpables por sentirnos culpables. Nos enfada estar enfadados. Nos pone nerviosos estar nerviosos. ¿En qué estoy equivocándome? Por esa razón es importante que las cosas te importen una mierda. Y eso es lo que salvará al mundo.
Mark Manson. El sutil arte de que (casi) todo te importe una mierda