Touchstone dice que hay mucha virtud en un si… (if). Y según la ética de los Duendes toda virtualidad mágica empieza con un si… (if). La expresión característica del país de las hadas es siempre: “Puedes vivir en un palacio de oro y zafiro si… nunca pronuncias la palabra vaca”; o “serás feliz con la hija del Rey si… nunca ves una cebolla”. La promesa siempre depende de un veto. Todas las cosas fantásticas y vertiginosas que se conceden dependen de alguna pequeña cosa que se veta. Todas las asombrosas y apasionantes cosas que se van a conceder dependen de una sola cosa que está prohibida.
G.K. Chesterton. La ética en el país de los duendes