Toda forma suprema de amor, es una matriz cristalina y eterna. Ser bello es hacerse centro de amor, y morar otra vez en el himen divino.
Ramón María del Valle-Inclán. La lámpara maravillosa
Toda forma suprema de amor, es una matriz cristalina y eterna. Ser bello es hacerse centro de amor, y morar otra vez en el himen divino.
Ramón María del Valle-Inclán. La lámpara maravillosa