Si los ciudadanos continúan recluyéndose cada vez más estrechamente en el círculo de los pequeños intereses domésticos, y continúan agitándose sin descanso, podemos temer que acabarán convirtiéndose en inaccesibles a las grandes y poderosas emociones públicas que alteran los pueblos, pero que los desarrollan y los renuevan. Cuando veo que…
Plantas terapéuticas
Harbert recogió cantidad de tallos de albaca, de romero, de toronjil y otras plantas que poseen propiedades terapéuticas. Cuando, más tarde, Pencroff preguntó de qué servía toda aquella colección de hierbas, el joven respondió: –Para curarnos a nosotros mismos, cuando estemos enfermos. –¿Y por qué hemos de estar enfermos, si…
Perderlo todo
Pero los hombres que viven en una comodidad igualmente alejada de la opulencia y de la miseria, otorgan a sus bienes un valor inmenso. Como todavía son muy próximos a la pobreza, ven de cerca sus rigores, y los temen; entre la pobreza y ellos, no hay nada más que…
Saborear placeres vulgares
Los moralistas se quejan constantemente de que el vicio favorito de nuestra época es el orgullo. Esto es verdad en cierto sentido: no hay nadie, en efecto, que no crea valer más que su vecino y que acepte obedecer a su superior. Pero es muy falso en otro sentido; porque…
Forzar el alma
Pero, si la igualdad de condiciones da a todos los ciudadanos algunos recursos, impide que ninguno de ellos tenga recursos demasiado amplios; cosa que recluye necesariamente los deseos en límites bastante estrechos. En los pueblos democráticos, la ambición es, pues, ardiente y continua, pero no puede apuntar habitualmente muy arriba;…
Ser arrastrado por la multitud
En las democracias, en las que los ciudadanos no difieren nunca mucho unos de otros, y se encuentran naturalmente tan cerca que a cada instante puede pasar que se confundan todos en una masa común, se crea una multitud de clasificaciones artificiales y arbitrarias con la ayuda de las cuales…
Los ciudadanos de una democracia
Todos los hombres que viven en los tiempos democráticos contraen más o menos los hábitos intelectuales de las clases industriales y comerciantes; su espíritu toma un aspecto serio, calculador y positivo; se aparta de buen grado del ideal para dirigirse hacia algún objetivo visible y cercano que se presenta como…
El amo y el trabajador
Mientras el trabajador aplica cada vez más su inteligencia al estudio de un solo detalle, el amo pasea cada día su mirada sobre un conjunto más vasto, y su espíritu se extiende en la misma proporción que el del otro encoge… El uno se parece cada vez más al administrador…
Pagar con el alma
Es difícil luchar contra el deseo; pues lo que quiere, lo compra al precio del alma. Heráclito de Éfeso
La pasión por el bienestar
Así, los hombres de los tiempos democráticos tienen necesidad de ser libres a fin de procurarse más fácilmente los goces materiales por los que constantemente suspiran. A veces ocurre, sin embargo, que el gusto excesivo que conciben por estos mismos goces los entrega al primer amo que se presenta. La…