En nuestra calidad de especie, hemos mostrado un desinterés infantil y una incredulidad parcial en lo concerniente al tiempo anterior a nuestra aparición en la Tierra. Sin deseos por conocer las historias que carecen de protagonistas humanos, muchas personas simplemente no quieren ser molestadas con la historia natural; en consecuencia, somos intemperantes e intemporales: analfabetos en lo que al tiempo respecta.
Marcia Bjornerud. Conciencia del tiempo.