
El pragmatismo es una cuestión de necesidades humanas; y una de las primeras necesidades humanas es ser algo más que un pragmatista.
G.K. Chesterton. Ortodoxia
Frases y fragmentos de libros que te harán pensar
El pragmatismo es una cuestión de necesidades humanas; y una de las primeras necesidades humanas es ser algo más que un pragmatista.
G.K. Chesterton. Ortodoxia
En la medida en que la religión ha desaparecido, la razón también lo hace. Porque ambas son del mismo tipo primario y autoritario. Ambas son métodos de prueba que no pueden probarse por sí mismos. Y en el acto de destruir la idea de la autoridad divina hemos destruido en gran medida la autoridad humana, mediante la cual hacemos una suma de divisiones largas. Con un tirón largo y sostenido hemos intentado quitarle la mitra al hombre pontificio; y su cabeza ha salido con ella.
G.K. Chesterton. Ortodoxia
Estamos en camino de producir una raza de hombres demasiado modestos mentalmente para creer en la tabla de multiplicar. Corremos el peligro de ver filósofos que dudan de la ley de la gravedad como si esta fuese una mera fantasía propia. Los burladores de la antigüedad eran demasiado orgullosos para ser convencidos; pero los de hoy son demasiado humildes para ser convencidos. Los mansos efectivamente heredan la tierra; pero los escépticos modernos son demasiado mansos incluso para reclamar su herencia.
G.K. Chesterton. Ortodoxia
Tal vez cuando el hombre de la calle parecía no verlo fue solo su astucia; tal vez cuando el policía le preguntó su nombre fue solo porque ya lo sabía. Pero ¡cuánto más feliz sería si supiera que a esta gente no le importa usted! ¡Cuánto más grande sería su vida si su yo pudiera empequeñecerse en ella; si realmente pudiera mirar a otros hombres con curiosidad y placer comunes; si pudiera verlos caminar como lo hacen en su soleado egoísmo y su viril indiferencia! Comenzaría a interesarse en ellos, porque ellos no están interesados en usted. Usted saldría entonces de ese pequeño y sórdido teatro en el que siempre se representa tu propia pequeña trama y se encontraría bajo un cielo más libre, en una calle llena de espléndidos extraños
G.K. Chesterton. La ética en el país de los duendes
Siempre es peligroso para la mente calcular la mente. Alguien frívolo ha preguntado por qué decimos: “tan loco como un sombrerero”. Una persona más frívola podría responder que un sombrerero está loco porque tiene que medir la cabeza humana.
G.K. Chesterton. La ética en el país de los duendes
Las rarezas solo afectan a la gente corriente. Las rarezas no afectan a la gente rara. Por eso la gente corriente se lo pasa mucho mejor, mientras que la gente rara siempre se queja de lo aburrido de la vida. Por eso también las nuevas novelas mueren tan rápidamente y los viejos cuentos de hadas perduran para siempre.
G.K. Chesterton. La ética en el país de los duendes
¿Cómo podemos lograr estar asombrados por lo extraño que nos resulta el mundo y, sin embargo, al mismo tiempo, permanecer en él con la tranquilidad de sentirnos en casa? ¿Cómo puede esta extraña ciudad cósmica, con sus ciudadanos de muchas piernas, con sus lámparas monstruosas y antiguas, cómo puede este mundo brindarnos a la vez la fascinación de una ciudad extraña y la comodidad y el honor de ser nuestra propia ciudad?
G.K. Chesterton. La ética en el país de los duendes
Todos hemos leído en libros científicos y, por supuesto, en todo tipo de novelas, la historia de un hombre que había olvidado su nombre. Andaba por las calles y veía y se daba cuenta de todo, pero no podía recordar quién era. Pues bien, todo hombre es protagonista de esa historia y ha olvidado quién es. Entendemos el cosmos, pero no somos capaces de entender el yo. Nos es más lejano que cualquier estrella.
G.K. Chesterton. La ética en el país de los duendes
La mayoría de los depredadores culminales del planeta son animales majestuosos. Millones de años de dominio los han henchido de confianza en sí mismos. Sapiens, en cambio, es más como el dictador de una república bananera. Al haber sido hasta hace muy poco uno de los desvalidos de la sabana, estamos llenos de miedos y ansiedades acerca de nuestra posición, lo que nos hace doblemente crueles y peligrosos. Muchas calamidades históricas, desde guerras mortíferas hasta catástrofes ecológicas, han sido consecuencia de este salto demasiado apresurado.
Yuval Noah Harari. Sapiens. De animales a dioses
Puesto que los humanos nacen subdesarrollados, pueden ser educados y socializados en una medida mucho mayor que cualquier otro animal. La mayoría de los mamíferos surgen del seno materno como los cacharros de alfarería vidriada salen del horno de cochura: cualquier intento de moldearlos de nuevo los romperá. Los humanos salen del seno materno como el vidrio fundido sale del horno. Pueden ser retorcidos, estirados y modelados con un sorprendente grado de libertad. Esta es la razón por la que en la actualidad podemos educar a nuestros hijos para que se conviertan en cristianos o budistas, capitalistas o socialistas, belicosos o pacifistas.
Yuval Noah Harari. Sapiens. De animales a dioses